Promesa.

No sé que decir. Empezar un texto, un escrito o como quieras llamarlo. Empezar por lo que siento es figurita repetida en estos días, no me encuentro a mí, no encuentro lo que quiero. No encuentro a las personas que pense que estaban conmigo en toda esta multitud de cosas que pasan en esta no-vida. Pierdo un sentimiento, una voz, una esperanza, un amigo. Quien crei que era una cierta persona de un dia al otro es simplemente un desconocido, sí a vos qe solías ser mi mejor regalo de la vida, más alla de otros muy buenos, sí a vos te digo, hoy sos parte de un NOSÉ enorme que ocupa todo y más de lo que podés siquiera imaginarte. A vos, que osás decir que sos mi mejor, ya tus palabras son poco menos que un balbuceo sin sentido que no logro comprender del todo, vos quien dice jurar amor por mi, sos un pobre desgraciado, al que la vida hizo tropezar conmigo, otra pobre desgraciada. Simplemente un ser humano intentando construir una relación con poco mas que semillas, sin fruto alguno. Vos a quien dije ser parte de mi vida y primordial, casi tan vital como respirar, hoy sos un espectador de mis pesares muy distante de la palabra amigo, sos un profesional del defraude y un aficionado de la observacion. Vos, quien dijo alguna vez que sus pesares eran mis pesares, entonces como debes estar ahora, tan desgarrada estoy yo y vos solamente mirás, sin más ni menos, mirás, me ves ser endeble, me ves frágil, y solamente sos parte del paisaje, del público. Vos, que pensás no tener recursos mejores que los que utilizas, sabes mejor que yo y que nadie que los hay, que hay maneras de ayudarme y sin embargo sos ni más ni menos que un mirón, un concurrente a la función de mi dolor, sos nadie. Sos poco. Sos escaso, exiguo, insuficiente, pequeño, corto, limitado, falto, carente, disminuido, reducido, menguado, irrisorio, ridículo. Sos la burla de mi creacion, la creacion que tenia en mi cabeza de quien solías ser. Y repentinamente, me encuentro en un lugar en el que jamás había estado, un lugar recóndito de mi mente, un lugar que pocas muchas veces visito, que es la duda de saber si alguna vez fuiste quien solías ser para mí. Me pregunto, si sos quien pienso que sos y si podés ser quien pienso que podés llegar a ser. Me pregunto si no te es mucha molestia dejar por más de veinte (20) minutos tu atareada vida para ocuparte de lo que solía ser una vaga amistad, a la que acostumbrabas llamar amistad. Sí, a vos, quien frecuentemente visitabas estos lugares para leer al menos como me sentía, quiero decirte tácitamente, virtualmente, implícitamente, silenciosamente, que no te pongas mal, que esta vez, como muchas otras mi pesar como más de una vez(repito), sos vos.